Tres Mujeres que hicieron historia por una Pintora
Detrás de lo aparente, Abel Acevedo
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Tres Mujeres que hicieron historia por una Pintora
Iris Perutic Burcio
Gabriela Mistral
1889 -1957
Como flor de mi sentir, mis palabras acuden, para evocar en esta misma mesa, la dulce tarea de despertar mis estrellas. Mi mano se aferra en un papel caduco y nuevo, con los recuerdos de mi niñez y juventud. Tú, canción, hecha ahora de pensamiento te detienes. Mi mano me lleva al jardín, el patio soleado de la casa de mis raíces, un arco iris de colores y la esquina verde de árboles añejos.
En ese perfume, suenan tus palabras sagradas sobre las montañas, el alerce, el copihue de tu Chile Creación de Patria. Las alamedas están altivas, en caminos comunes del indio afincado milenariamente. El alerce y el maitén, sombras del atajo amigo entre el sol y la luna.
Tus libros, Elogio de las cosas de la tierra, Repertorio americano.
Sol de los mayas, Sol de los incas, con tu lenguaje metafórico, místico y sencillo, plenos de matices de habla hispana americana. Tus llaves de Luz, me surgieron en esa “Oración a la maestra “entregada en el momento de mi graduación como maestra.
América te debe el Premio Nobel ganado en 1945, otorgado a una mujer. Lucila Godoy Alcayaga – Gabriela Mistral…Fuerte valor de la Educación, de la Poesía para este Sur, fuiste orgullo y lo serás siempre.
Mariquita Sánchez de Thompson
1786 - 1868
Guardan las sombras del Sur, tu carácter y fuerte personalidad. Desde tu juventud estuviste presente en la Historia simbólica argentina. Nacida en esa primavera de 1.786, tu corazón decidió por el Amor.
Nadie impidió realizar tu sueño de niña-mujer y a pesar de los escépticos, diste color a la nada. Las paredes de tus sueños no lucían como mármol frío: Dama activa, esposa dos veces, madre de varios hijos y protagonista del proceso revolucionario y constitucional. Trabajadora incansable como personaje de las Letras, la educación y la salud, tomaste al Amor como una razón de estado. Brisa, viento, sol de verano con el canto invisible de los pájaros que rodean a los seres palpitantes, abrió para las mujeres la ventana de la Esperanza.
La lluvia de los pétalos de la rosa, las magnolias perfumadas no entraban en la morada solitaria de la Mujer; Ella abrió sus puertas.
Juana Manuela Gorriti
1815 - 1896
En tu nombre, tu padre el Gral. Gorriti y tu tío Juan Ignacio pusieron las formas de un temperamento indómito producido por la tierra argentina. Güemes acunó en sus brazos a esa niña pequeña y rubia alumbrando por siempre su destino férreo de libertad.
Un pasado en sombras, desolado por acciones llevadas al abismo del exilio para toda tu familia, no venció tu juventud, tu fe, y tu lealtad a los principios de tu carácter
Una prodigiosa memoria, sólo poseída por los grandes, no destruyó tus pensamientos en la soledad bolivariana. El perfume de los naranjos, las higueras con olor a dulce, las viñas salteñas y la llamada permanente de una tierra colmada de aires nacionales volaban en tu mente como sueño de escritora. Rompiste tu silencio en un sólo día. Umbrales de olvido y valentía abandonaron tu existencia pasada de esposa fiel para seguir la vocación de tu alma y edificar un futuro de independencia
Las letras argentinas y tus libros de anécdotas y personajes de costumbres, nos recuerdan la época maravillosa del norte argentino, dando origen al romanticismo americano.
Juana Manuela Gorriti: visión premonitoria en nuestra historia del papel de la Mujer libre en la Sociedad.
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